Si experimenta rigidez por las mañanas, dolor generalizado en la zona del cuello y molestias al girar la cabeza de un lado a otro, es posible que tenga el cuello inflamado. Está usted en buena compañía: en los últimos años, varios estudios han informado de que hasta 6 de cada 10 personas en Italia sufren dolor de cuello, lo que eleva a 15 millones el número de individuos que, de un modo u otro, tienen que buscar atención médica.
Desgraciadamente, el dolor de cuello es sobre todo el resultado de la modernidad: cuando no es consecuencia de un traumatismo físico, es en el sedentarismo, el trabajo de oficina, las muchas horas pasadas delante del PC y los hábitos erróneos donde hay que buscar los orígenes.
La buena noticia es que el dolor de cuello puede aliviarse y, sobre todo, prevenirse.
Causas del dolor de cuello
La cervicalgia, que es el nombre clínico del dolor de cuello, puede depender de numerosos factores, algunos no modificables, como la edad, el estado general de salud y la degeneración de los discos intervertebrales, y otros modificables, como la postura, los hábitos y el estrés.
Entre las causas del dolor de cuello también se incluyen los golpes de frío, la humedad, las actividades deportivas que someten al cuello a una tensión excesiva y el uso de almohadas inadecuadas que fuerzan la cabeza a adoptar posturas incorrectas.
Para comprender mejor la naturaleza del dolor de cuello, los médicos se basan en esta clasificación:
- causas traumáticas - Aquí se incluyen todos los dolores cervicales derivados de latigazos cervicales, accidentes de coche o golpes en el cuello.
- causas mecánicas - Puede sonar extraño, pero la maloclusión dental, la escoliosis, los pies planos y la respiración torácica en lugar de diafragmática también pueden causar dolor de cuello.
- causas metabólicas - En este caso, el metabolismo es el responsable de la inflamación del cuello. El debilitamiento excesivo de la masa muscular, de hecho, tiene un efecto negativo sobre la postura y los movimientos del cuello, lo que provoca dolor cervical.
- causas neurológicas - Como ya se ha mencionado, el estrés también puede contribuir a la aparición del dolor de cuello, al igual que la ansiedad como una de las causas de la cervicalgia.
Dolor de cuello: síntomas
Si está pensando en sufrir una cervicalgia, lo más probable es que sea porque experimenta un dolor generalizado en el cuello. De hecho, entre los síntomas de un cuello inflamado se encuentra el dolor, que puede variar de leve a intenso. En el primer caso, sólo se tratará de una tensión en la base del cuello, que a veces puede generar una desagradable sensación de impedimento para realizar incluso las acciones más sencillas. En el segundo, puede llegar a asumir intensidades difíciles de soportar, hasta el punto de percibirse como verdadero dolor.
El dolor de cuello también puede ir acompañado de compresión nerviosa en la zona cervical, lo que genera entumecimiento, sensación de hormigueo en manos y brazos, ardor a lo largo de la parte superior de la espalda y sensación general de debilidad en las extremidades.
A medida que la cervicalgia empeora, las molestias también aumentan. Los dolores de cabeza de origen cervical, las náuseas y los mareos son muy frecuentes y, cuando se asocian a la cervicalgia, indican que se ha alcanzado el punto de no retorno: ahora sí que es necesario intervenir con los remedios más adecuados para la cervicalgia.
Remedios para el dolor de cuello
Ceder ante el dolor de cuello nunca es una buena idea, sobre todo porque normalmente, si no se toman a tiempo las contramedidas adecuadas, acabará aumentando en frecuencia e intensidad.
En algunos casos, los analgésicos son indispensables, pero el mejor analgésico para el cuello sigue siendo el movimiento. De hecho, entre los remedios para el dolor de cuello, la movilización cervical es uno de los más eficaces. En efecto, el dolor de cuello se debe a un aplastamiento de las vértebras del cuello, por lo que lo primero que hay que pensar es en volver a separarlas, evitando que la fricción entre ellas provoque protuberancias o hernias.
Apuntarse a una clase de Pilates siempre es una buena idea, pero si no tienes tiempo, también puedes optar por sencillos ejercicios para el cuello que puedes hacer mientras estás en la oficina o en casa viendo la tele.
La postura, por tanto, será crucial. De nada sirve hacer ejercicios, consultar al médico, tomar medicamentos, si luego se fuerza la cabeza y el cuello en posiciones antinaturales. Controla la posición de la cabeza, que debe permanecer siempre recta, manteniendo la curvatura fisiológica normal del cuello. Relaje los hombros, evitando que se contraigan, alimentando el dolor de cuello. No cruce las piernas cuando esté sentado y, en todo momento del día, sea consciente de la posición de su columna vertebral, intentando corregir cualquier posible desequilibrio hacia delante o hacia atrás.
Se entiende que todos estos consejos sobre cómo combatir el dolor de cuello también contribuyen a su prevención: porque, como ya se ha mencionado, la principal causa del dolor de cuello es el sedentarismo, por lo que acostumbrarse a cuidarlo desde pequeños es un imperativo para cualquier persona que se preocupe por su bienestar.
Un último consejo vale para todos: hay que elegir una almohada cervical que proporcione a la cabeza el apoyo más adecuado durante el descanso.
Dolor de cuello: soluciones para dormir mejor
Pasamos alrededor de un tercio de nuestras vidas durmiendo, por lo que no debería sorprendernos que el dolor de cuello esté causado en gran medida por posturas incorrectas durante la noche.
Al dormir, es esencial que la separación de las vértebras, de la C1 a la C7, esté asegurada para evitar cualquier compresión. ¿Y cuál es la mejor almohada para las cervicales? Evidentemente, la que ayuda a la columna cervical a mantener su curva fisiológica natural.
Para combatir el dolor cervical, por tanto, es indispensable contar con una almohada ortopédica, la única capaz de garantizar un correcto apoyo del cuello, favoreciendo una postura lo más natural posible. De hecho, una almohada cervical le permitirá relajar los músculos del cuello, distanciar las vértebras y levantarse por la mañana menos rígido y dolorido.
Compre una almohada Pharmaflex, la mejor solución para combatir el dolor de cuello, pero también para prevenirlo. Porque como se suele decir, ¡más vale prevenir que curar!
